As Neves (Pontevedra) es un municipio fronterizo con Portugal, característico por sus casas de piedra y una rica variedad paisajística. Ríos, valles montes y viñedos de albarinho componen un lugar relajante donde perderse en busca de tranquilidad y naturaleza en estado puro.

El equipo de Thermor, junto con la empresa “Instalaciones As Neves”, se trasladaron a la localidad para un nuevo proyecto: la reforma total de una casa rural que había pertenecido con anterioridad a la empresa familiar gallega Pollos Lago, muy conocida por su actividad en el sector cárnico.

La casa contaba con un sistema de calefacción por caldera de biomasa que, debido a su elevado consumo, la propiedad quería reemplazar por una solución más eficiente. Después de llevar a cabo un estudio en profundidad, se apostó por una bomba de calor Alféa Excellia Monofásica 14, junto con un interacumulador Thermor de 300 litros IAC/S. La reforma del sistema de calefacción se completó con unos radiadores de aluminio sobredimensionados, trabajando con agua a 60°C de temperatura, que se ubicaron en las dos plantas de la vivienda y en la buhardilla.

El kit 2 zonas de Alféa permite regular la planta baja y la buhardilla, mientras que la segunda planta está siempre conectada en serie a la bomba de calor. Asimismo, los radiadores de la planta baja están controlados por un cabezal termostático y en la buhardilla se encuentran conectados a un colector.

La regulación del interacumulador de 300 litros se gestiona con el Kit ACS, que controla la producción de agua caliente, evitando así que disminuya el confort de la calefacción en el hogar. La gestión de la bomba de calor Alféa se realiza mediante el control T55, con sonda de ambiente, junto con un controlador remoto por radio T75, que permite regular la bomba de calor desde cualquier punto de la casa.

¿Cuáles son las 3 ventajas que más han destacado tanto los propietarios como la empresa instaladora?

  1. La bomba de calor Alféa de Thermor no requiere una limpieza especial, ya que no hay humo ni desechos para su correcto funcionamiento, así como tampoco malos olores, a diferencia de lo que les ocurría con la caldera de biomasa anterior.
  2. Reducción de costes en el consumo energético y por tanto una mejora de la economía familiar.
  3. Rápida recuperación de la inversión, debido a su alto rendimiento y a la eficiencia energética de los equipos Thermor instalados.